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¿Qué hace que la calidad del aire sea mala?

Ago 3, 2022

¿Qué hace que la calidad del aire sea mala?

A veces hay que volver a lo básico y explorar el problema fundamental de la mala calidad del aire. Para entender qué es una buena calidad del aire, tenemos que saber qué es lo que hace que la calidad del aire sea mala .

¿Qué hace que un aire tenga mejor «calidad» que otro? ¿Cómo definimos la mala calidad del aire? ¿Cómo la medimos y discutimos?

Y, lo que es más importante, ¿qué hacemos con esa información? Examinaremos el Índice de Calidad del Aire de la EPA y comprenderemos el papel que desempeña la calidad del aire en nuestra vida, y cómo podemos protegernos y proteger a nuestra familia cuando la calidad del aire es mala.

¿Qué es exactamente un aire deficiente o insalubre?

En Estados Unidos, la EPA mide cinco contaminantes del aire: el ozono troposférico, la contaminación por partículas, el monóxido de carbono, el dióxido de azufre y el dióxido de nitrógeno. Todos estos contaminantes están regulados por la Ley de Aire Limpio (Clean Air Act).

Tienen estaciones de control en todo el país que miden los contaminantes y devuelven los números en bruto. La EPA convierte estas cifras brutas en una puntuación del Índice de Calidad del Aire (ICA).

En inglés se le llama Air Quality Index o AQI.

La escala del AQI va de cero a 500.

  • 0-50: Verde. Buena calidad del aire.
  • 51-100: Amarillo. Calidad del aire moderada.
  • 101-200: Naranja. Insalubre para grupos sensibles.
  • 201-250. Rojo. Calidad del aire insalubre.
  • 251-300. Púrpura. Calidad del aire muy insalubre.
  • 301-500. Granate. Calidad del aire peligrosa.

Cada contaminante se califica por separado, porque tienen efectos diferentes y las distintas poblaciones pueden ser más sensibles a un contaminante que a otros.

Por ejemplo, tu ciudad podría tener una puntuación baja para las partículas contaminantes, pero también tener una alerta para los niveles de ozono naranja.

Muchas ciudades estadounidenses se mantienen en el nivel verde durante la mayor parte del año. Gracias a la Ley de Aire Limpio, los niveles generales de contaminación atmosférica en EE.UU. han disminuido en general desde la década de 1960.

Los niveles AQI Naranja y Rojo son raros en la mayoría de los lugares, y el Granate es extremadamente raro, excepto durante los incendios forestales.

En 2017, Hilo, Hawái, tuvo la peor calidad del aire en los Estados Unidos, con una puntuación media de AQI de 146 para el dióxido de azufre. Pero eso se debió a la proximidad de Hilo al volcán activo Mauna Loa.

La segunda peor contaminación del aire en Estados Unidos en 2017 fue en Riverside, California, con una mediana del AQI de 99 para el ozono.

Varias ciudades de California sufren de altos niveles de ozono debido a una combinación de contaminación de origen humano, el clima y la geografía.

Siempre puede consultar el mapa AQI para conocer la contaminación del aire en su zona. Si un contaminante tiene una puntuación de 101 (naranja) o peor, es posible que deba reflexionar sobre las actividades al aire libre que haya planeado.

La calidad del aire y tu salud.

Los niveles del ICA se basan en el conocimiento de que los niveles elevados de contaminantes tienen efectos en la salud de los seres humanos a corto y largo plazo.

Esos efectos pueden ser diferentes para distintas poblaciones y distintos contaminantes. Una puntuación AQI naranja puede significar que el aire es insalubre para los grupos sensibles.

Según la EPA, «las personas con enfermedades pulmonares, los niños, los adultos mayores y las personas activas al aire libre se consideran sensibles y, por tanto, corren un mayor riesgo» cuando los niveles de ozono se sitúan entre 101 y 200.

Asimismo, «las personas con enfermedades cardíacas o pulmonares, los adultos mayores y los niños se consideran sensibles y, por tanto, corren un mayor riesgo» cuando los niveles de contaminación por partículas se sitúan entre 101 y 200.

La actividad física puede ser un factor de riesgo importante cuando los niveles de contaminantes son de color naranja o superiores por dos razones.

En primer lugar, con niveles de esfuerzo elevados, las personas tienden a respirar por la boca en lugar de por la nariz.

La nariz y las fosas nasales actúan como un filtro para eliminar algunos contaminantes del aire antes de que éste llegue a los pulmones.

Respirar por la boca evita este sistema de filtrado natural.

En segundo lugar, el esfuerzo hace que la gente respire más profundamente y más rápido, por lo que un mayor volumen de aire se mueve a través de los pulmones exponiéndolos a más contaminantes.

Los efectos específicos sobre la salud de los niveles elevados de contaminación atmosférica incluyen:

Ozono.

A corto plazo: tos, dolor de garganta, reducción de la función pulmonar, empeoramiento de los síntomas del asma.
A largo plazo: aumento de la susceptibilidad a las infecciones, daño a las células pulmonares, daño pulmonar permanente.

Contaminación por partículas.

A corto plazo: empeoramiento de los síntomas del asma, aumento de la tasa de eventos médicos (incluida la muerte) para las personas con enfermedades cardíacas o pulmonares, dificultad para respirar.
A largo plazo: aumento del riesgo de enfermedad pulmonar y de ataque al corazón, mayor susceptibilidad a las infecciones, empeoramiento de los síntomas de las enfermedades respiratorias.

Monóxido de carbono.

A corto plazo: reducción del estado de alerta, problemas de visión, dolor en el pecho y dificultad para respirar en personas con enfermedades cardiovasculares.


A largo plazo: los efectos de la exposición al monóxido de carbono de bajo nivel están poco estudiados y no están claros.

Dióxido de azufre.

A corto plazo: empeoramiento grave de los síntomas del asma, incluida la restricción de las vías respiratorias; a niveles de exposición elevados, incluso las personas que no padecen asma pueden experimentar estos síntomas.
A largo plazo: empeoramiento del asma y otros síntomas respiratorios.

¿De dónde viene la mala calidad del aire?

Hay muchas fuentes potenciales de contaminación del aire, algunas de las cuales son incoloras e inodoras. La fuente de información más fiable sobre los niveles actuales de calidad del aire es la puntuación AQI actual de tu zona.

La contaminación del aire puede aumentar debido a las estaciones, los patrones climáticos, los desastres naturales o incluso la hora del día.

Conocer las fuentes y los patrones de contaminación puede ayudarle a evitar lo peor. El ozono suele formarse como efecto secundario de la descomposición de otras sustancias químicas en el aire.

La contaminación de los coches, las refinerías y otras instalaciones industriales son fuentes habituales de sustancias químicas que acaban convirtiéndose en ozono.

El sol caliente del verano puede descomponer rápidamente las sustancias químicas en ozono. Sin el viento para dispersar el ozono, pueden alcanzar altos niveles.

La contaminación por partículas procede de una gran variedad de fuentes. Las más comunes y peligrosas son los automóviles y los incendios.

Las carreteras muy transitadas generan grandes cantidades de partículas, procedentes del hormigón desgastado, los neumáticos de goma y las pastillas de freno de los coches.

Los incendios, ya sean de fuegos silvestres o de estufas de leña, crean un gran volumen de partículas finas. Éstas son las más peligrosas porque pueden llegar fácilmente a los pulmones.

El ozono y las partículas son las más comunes y peligrosas fuentes de contaminación para la mayoría de las personas. Sin embargo, también es importante conocer otros tipos de contaminación.

La contaminación por monóxido de carbono procede casi en su totalidad de los tubos de escape de los vehículos, y es peor durante los meses más fríos, pues es entonces cuando la combustión ineficiente da lugar a la producción de más monóxido de carbono.

El dióxido de azufre es un contaminante industrial generado por la quema de combustibles fósiles, y suele estar en niveles altos cerca de las centrales eléctricas de carbón.

Cómo hacer frente a la mala calidad del aire.

¿Qué debes hacer si el AQI indica niveles de contaminantes poco saludables en tu zona?

  • Quédate en casa: Tu casa no es hermética, por lo que la contaminación del aire exterior acabará generando contaminación del aire interior. Pero cerrar las ventanas y encender el aire acondicionado te ayudará sin duda si hay un pico en los niveles de contaminantes, especialmente a los que eres sensible.
  • Limita el ejercicio: Como hemos dicho antes, el ejercicio intenso provoca una respiración pesada. Eso empeora la exposición a la contaminación atmosférica. Si eres sensible a la contaminación atmosférica debido al asma o a una enfermedad cardíaca, evita el ejercicio en los días de fuerte contaminación atmosférica. Si no eres sensible, debe reducir el ejercicio para evitar una respiración muy pesada.
  • Aléjate: A veces la mejor solución es alejarse temporalmente de la fuente de contaminación o evitarla. Evita las autopistas con mucho tráfico en las horas punta, pasa el fin de semana en casa de un amigo si vives a sotavento de los incendios forestales, o sal de la ciudad en los días de fuerte contaminación por ozono.

Aunque solemos centrarnos en la calidad del aire interior, la contaminación atmosférica afecta en última instancia tanto al aire interior como al exterior, por lo que entenderla y afrontarla es importante para cualquiera que desee respirar un aire lo más limpio posible.

Comprobar el AQI y saber a qué contaminantes eres sensible te permitirá mitigar los problemas de salud más graves relacionados con la contaminación del aire.

Marcelo Ulloa

Soy Marcelo Ulloa, un entusiasta de los servicios esenciales para el hogar, desde cerrajería hasta plomería, HVAC y control de plagas. Mi curiosidad me llevó a explorar la profundidad y amplitud de estos campos, descubriendo la importancia de cada uno en nuestra vida diaria. En cotizacion.co, comparto mis insights, recomendaciones y experiencias en estos ámbitos, buscando ofrecer a los lectores consejos prácticos y soluciones efectivas. Mi misión es desmitificar estos servicios, proporcionando información clara y útil para que todos puedan tomar decisiones informadas sobre el cuidado y mantenimiento de sus hogares. Fuera de la escritura, disfruto investigando las últimas tendencias en herramientas y tecnologías del hogar.